Wenders en Madrid. La foto es de Izas. Hace unas semanas lo conocimos brevemente. A Wenders le queremos involucrar en un proyecto al que damos vueltas en el curro y por eso fuimos a su encuentro. Wim, algo dormido, extravagante, lacónico y lentito de habla, es director, fotógrafo y profesor. También ha sido montador, director de foto y productor. De todo, vamos.
Amigo íntimo de gente como Dennis Hopper o Coppola, está diseñando la nueva carrera de ciencia de las imágenes que ofrece la Academia de Bellas Artes de Hamburgo.
Para Wenders, como para muchos, la tecnología digital es una revolución tan importante como el surgimiento de las películas con sonido, una oportunidad revolucionaria para los futuros cineastas. Que así sea.
Su última y algo aburrida e inocente película (Tierra de abundancia) es un ejemplo de la importancia que le da a esta nueva forma de hacer cine. La rodó en 16 días. Con un par. En resumen, un tío majo.
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1 comentario:
Tuvo que ser un encuentro interesante éste.... ;)
El caso es que a mí Wenders no me atrae demasiado como cineasta. Me parece gafapastil a más no poder: a todo aquel que quiere dárselas de "cinéfilo" de pro han de molarle sus trabajos, por muy aburridos que sean. Y si no te gustan es que no tienes ni puta idea, y solo te falta la boina para parecer Alfredo Landa en "Genaro el de los 14". Todo vale para presumir de Dragó de salón ante una tía, para ver si cae la breva y se folla algo, para variar xD.
Será mala suerte, pero el caso es que todas las películas suyas que he visto hasta ahora son soporíferas. La única que he visto en pantalla grande, "Hasta el fin del mundo", me produjo una soñera tal que, cuando acabó la proyección, me tuvo que despertar la mujer de la limpieza (fui solo al cine). Horrenda. Diríase, en vista de lo comentado en el post, que este tío traslada toda su soporífera forma de ser a sus películas....
Si Wenders está colaborando en el programa de estudios de una carrera universitaria, ya se qué carrera no pienso cursar jamás :p
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