miércoles, noviembre 05, 2008

Marsé contra el cine español

Juan Marsé es uno de los niños bonitos de la crítica. Se hizo con el Premio Planeta en el 78 gracia a La muchacha de las bragas de oro, novela que Vicente Aranda adaptó con su chabacanería habitual. En 1990 logra el Ateneo de Sevilla gracias a El amante bilingüe, que Aranda adaptó también de manera aun más ramplona.

La crítica vuelve a encumbrarlo en 1994 gracias a El embrujo de Shanghai, con la que Fernando Trueba hace un pestiño de no te menees. El último atentado contra su trabajo ha sido perpetrado otra vez por Aranda: Canciones de amor de Lolita's Club. Inenarrable.
Las restantes adaptaciones son Ronda del Guinardó, Un día volveré, El largo invierno, Si te dicen que caí, Últimas tardes con Teresa y La oscura historia de la prima Montse.

Con 75 tacos hay muchos que ya no se andas con polleces y Marsé es uno de esos vejetes de lengua mefítica y escasa diplomacia. Su próxima novela, de la que ya lleva escritos más de 200 folios, será «un ajuste de cuentas» con las adaptaciones cinematográficas que se han hecho de sus obras.

«Es que me tienen bastante harto», ha asegurado Marsé en rueda de prensa. Para él son malos todos los guiones que se han hecho a partir de sus novelas. «El cine español la suele pifiar en el trasvase de palabras a imágenes. El guión de La muchacha de las bragas de oro prometía, mientras que el de El embrujo de Shangai ni siquiera convencía. ¿Una razón? Simple: el cineasta en cuestión tiene poco talento».

Lo mejor de su última rueda de prensa, el remate: «El Ministerio de Cultura lo podrían suprimir ya que la televisión es el auténtico Ministerio de Cultura».

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Y si tan escarmentado está de sus adaptaciones, ¿para qué va a los rodajes? ¡Menudo contrasentido!

Dr. Panoplias

Anónimo dijo...

Verdades como templos.

Aunque a lo mejor no le fastidia tanto, sobre todo si deja que le jodan tantas obras suyas. Un puntito hipócrita si que tiene, un puntito subvencionado por los consiguientes derechos de adaptación.

Ciertamente serán bodrios, pero bien que podría haber cortado el grifo antes.

IVAN REGUERA dijo...

Dr. Panoplias: Pienso como Israel. Es otro contrasentido ceder tus derechos sabiendo que una y otra vez te están haciendo truños.

Es verdad lo que dice Nava: él cobra también del presupuesto de una peli subvencionada.

Pero, ay amigos, la pela es la pela y sólo de la literatura no se vive...

especies dijo...

Bueno, chicos, si uno, además de sufrir la maldición de tropezar en la misma piedra vez tras vez, encima tiene que decir que le parece bien, menudo plan.

Lo que dice está muy bien, sobre todo lo del ministerio.

IVAN REGUERA dijo...

Especies: Sí, es un gran remate.

Anónimo dijo...

Eso de que en la tele está el Ministerio de Cultura descubre más, creo, tiempos pasados (Carmen Calvo pixit); Cesar Antonio de Molina parece más currante, y bastante menos arrogante, por lo menos pone en la Biblioteca Nacional a una experta en gestión bibliotecaria (¿cultural?) y no a una poetisa que hizo perder hasta los más escondidos Ptolomeos.

IVAN REGUERA dijo...

DANI: Ay la REGÁS qué tiempos más oscuros...

Anónimo dijo...

Dani: no conozco al Ministro de Cultura, pero lo de arrogante, no sé qué decirte. Mira este titular .

IVAN REGUERA dijo...

-¿Dónde estudió y quiénes fueron sus compañeros?
-Lo cuento en el tercer tomo de mis memorias.

MADRE DE DIOS, ISRAEL. ESTE ES UN DOCUMENTO DE PRIMERA. ¡¡¿CÓMO SE PUEDE SER TAN PEDANTE Y ARROGANTE?!!

PERLAS SELECTAS:

Él (ZP) dijo lo que siempre dice: que, además de ser un gran intelectual y un gran gestor, soy más político de lo que creo. Era una manera de decirme que lo iba a hacer tan bien. Luego, Pepe Blanco, gran amigo, me llamó para centrar el asunto y aquí estoy, y no me arrepiento en absoluto.

Yo soy escritor y mis 40 libros ya me han dado cierta trascendencia.

No tengo una actividad deportiva física y el poco tiempo que tengo lo dedico al aspecto creador.

Creo que soy muy conocido y muy popular. Así lo dicen las ventas de mis libros.

EN FIN...

Anónimo dijo...

Vaya palabras le dedica Enrique Dans al Ministro de Cultura:

http://www.enriquedans.com/2007/12/el-ministro-de-cultura-es-un-mentiroso.html

No tiene desperdicio, y no es por hacer publicidad, porque la publicidad no se hace gratuitamente :-)

IVAN REGUERA dijo...

Juanpaulus: "Un mentiroso. Un embustero, un farsante, y lo que es peor, alguien que miente no por ignorancia, sino de manera artera y malintencionada para beneficiar a una causa determinada".

Muy intesante y muy valiente el Dans.